Zelaya cruzó la frontera hacia las 14H25 locales (20H25 GMT) en el paso fronterizo en Las Manos, custodiado por decenas de militares en ropa de combate y con sus escudos, mientras millares de sus seguidores desafiaban el toque de queda impuesto al mediodía por el gobierno de facto de Roberto Micheletti.
El derrocado jefe de Estado permaneció unos minutos unos centímetro más allá del límite, sin avanzar al puesto migratorio, y luego retrocedió nuevamente hacia Nicaragua.
Enfundado en un traje estilo vaquero y con su inseparable sombrero, Zelaya había llegado a la frontera en un jeep blanco, escoltado por una larga caravana de vehículos en su mayoría de la prensa, y permaneció durante hora y media en la tierra de nadie entre ambos puestos migratorios.
Poco antes de su simbólico y fugaz regreso a Honduras, hacia donde fue expulsado en pijamas la madrugada del 28 de junio, Zelaya había dicho que lo primero que haría al ingresar sería "llamar al diálogo y hablar con la gente".
No hay comentarios.:
Publicar un comentario