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POR RUDDY GERMAN PEREZ
Las intensas lluvias agravaron hoy la situación de miles de residentes en sectores como La Barquita, La Ciénaga, El Dique, La Mina y El Hoyo, en Guarícano, Los Tres Brazos y otros, en algunos de los cuales las aguas llegaron hasta los techos de las viviendas.
La situación más crítica era esta mañana la de los residentes en La Barquita, en Los Mina, donde la crecida del río Ozama sepultó totalmente más de 200 viviendas cuyos ocupantes fueron evacuados por la Defensa Civil, y el Cuerpo de Bomberos de Santo Domingo Este.
Tres campamentos de refugiados instalados por la Defensa Civil fueron arrasados por las aguas, según pudieron comprobar periodistas de este diario.
Los afectados se quejaron de que las entidades gubernamentales de socorro no habían acudido en auxilio de las familias que perdieron sus viviendas con todos sus ajuares.
La crecida del río Ozama fue tan grande que las aguas estaban a las 9:00 de esta mañana a pocos metros de la carretera que comunica a Los Mina con Sabana Perdida, amenazando con interrumpir el tránsito.
Numerosos agentes de la Policía y de la Autoridad Metropolitana de Transporte (Amet) se mantenían en el lugar para evitar que ocurriera una tragedia.
Muchas familias residentes en el sector La Javilla, de Sabana Perdida, abandonaron sus casas ante el temor de que el río penetrara al lugar, donde tres colmados y otros establecimientos quedaron inundados.
En tanto que en el sector El Dique, en la margen oriental del río Ozama, decenas de viviendas también fueron inundadas, especialmente las aguas que corren por las alcantarillas.
En Los Tres Brazos decenas de personas abandonaron sus casas y otras se refugiaron sobre los techos debido al avance de las aguas del río Ozama, que arrastraban enormes cantidades de basura, animales muertos y chatarras.
Algunas personas optaron por sacar sus ajuares y llevarlos a lugares seguros ante el temor de perderlos a causa de las intensas lluvias.
En Guarícano, residentes en los sectores La Mina y El Hoyo denunciaron que las aguas continuaban subiendo, sin que las autoridades hayan acudido en su auxilio.
Denunciaron que más de 50 viviendas estaban inundadas y que sus ocupantes han tenido que refugiarse en casas de vecinos, amigos y familiares.
En los sectores afectados se requerían frazadas, colchones, agua potable, comidas enlatadas, leche, pan y otros productos, según dijeron los afectados.
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