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El Gobierno propondrá gravar con el Itebis algunos productos todavía no precisados, pero estarán excluidos la leche, las medicinas y los insumos agrícolas. Se proyecta también mantener hasta el 2009 la tasa del 30% establecida al Impuesto sobre la Renta de las personas físicas y jurídicas
El presidente Leonel Fernández anunció anoche en un discurso de aproximadamente cuarenta minutos de duración el contenido del proyecto de reforma fiscal que se propone someter próximamente al Congreso Nacional, con la que persigue recaudar 17,500 millones de pesos adicionales.Entre las medidas incluidas en el proyecto de reforma anunciado anoche por el presidente Leonel Fernández figuran la ampliación del Impuesto a la Transferencia de Bienes Industrializados (Itbis) a “unos pocos productos”, que no especificó, y la duplicación del impuesto a las viviendas suntuarias.
El mandatario también mencionó una corrección a los impuestos selectivos a las bebidas alcohólicas y el tabaco y el restablecimiento de los impuestos selectivos del cinco por ciento a las habitaciones de hoteles, moteles, apartahoteles y similares, así como el diez por ciento a los servicios de seguros, los cuales se aplicaban anteriormente.Aunque no citó los productos que serían gravados con el Itbis, dijo que no alcanzaría la leche, las medicinas y los insumos agrícolas, como se había dicho con la intención de “sembrar la confusión y el pánico”.
Dijo que también propondrá al Congreso mantener hasta finales del 2009, el impuesto de 0,015 por mil a los cheques y transferencias, así como la tasa del 30 por ciento establecido al Impuesto Sobre la Renta de las personas físicas y jurídicas. Explicó que a partir del 2010, ese 30 por ciento comenzaría a desmontarse, hasta alcanzar el 25 por ciento de la renta neta imponible.
“El ajuste que se requiere para mantener el balance de las cuentas fiscales es de tres por ciento del Producto Interno Bruto (PIB), lo que representa un monto aproximado de 35 mil millones de pesos. De esos 35 mil millones de pesos, la mitad, que constituye el 1.5 del PIB; o sea, 17 mil 500 millones de pesos, vendrán por vía de la rectificación fiscal y la otra mitad, mediante la aplicación de una política de austeridad y ahorro por parte del Gobierno”, sostuvo.
“El Gobierno también se apretará el cinturón y controlará aún más sus gastos para que podamos cumplir; entre todos, con las metas comprometidas con el Fondo Monetario Internacional y continuar, como hasta ahora, con el proceso de recuperación y consolidación de la estabilidad y el crecimiento”, manifestó.Admitió que el incremento de los niveles de tributación en cualquier sociedad constituye siempre una experiencia desagradable, como es la medicina para el cuerpo enfermo, que nadie desea, pero que nadie puede prescindir de ella.
Rechazó que el Itebis será aumentado de un 16 al 18%, así como la aplicación de un gravamen a los retiros de dinero de los bancos y cajeros automáticos y gravar con un 15% los intereses recibidos por las personas físicas y de otros productos de primera necesidad.
El mandatario, quien pronunció un discurso por una cadena de radio y televisión de 38 minutos, expresó que el esfuerzo del Gobierno es para mantener la situación de crecimiento y estabilidad del país, al entender que es la única vía que le permitirá superar la pobreza, el atraso y la desigualdad y “conducirnos por un nuevo camino de prosperidad, progreso y modernidad”.
“Contrario a las voces agoreras que habían pronosticado los más graves cataclismos, la propuesta de rectificación fiscal, que procura evitar afectar a los más pobres, se concentra, esencialmente, en aprobar aquellas figuras impositivas que ya habían sido acordadas con los empresarios y demás sectores que participaron en el diálogo de la Pontificia Universidad Madre y Maestra, dirigido por monseñor Agripino Núñez Collado”, precisó.
En las doce primeras páginas de su discurso, Fernández hizo énfasis en los que juzgó como desaciertos del pasado gobierno y del congreso anterior y a otras razones locales e internacionales que hacen indispensable la nueva reforma.
Citó que el Gobierno había presupuestado 500 millones de dólares como subsidio a la electricidad, pero que debido al incremento de los carburantes, fue obligado a buscar 150 millones adicionales.El mandatario acusó al pasado Congreso, que era dirigido por la oposición, de jugar a hacer fracasar el Gobierno, para desde esa posición, reciclarse y ganar las elecciones de mayo pasado.“Al observar ese panorama, lo único que uno puede decir es, ¡cuánta irresponsabilidad!, ¡cuánta insensatez!, ¡cuánta falta de sentimiento patriótico!
Gobierno promete austeridad
Fernández aseguró que el Gobierno piensa ahorrar 17 mil 500 millones de pesos reduciendo los sueldos del personal temporero, sobresueldos, honorarios, dietas y gastos de representación, servicios de las telecomunicaciones, los viáticos internos y externos.Dijo que entre las partidas que el Gobierno piensa reducir para conseguir ese ahorro, figuran también el transporte y almacenaje, que incluye pasajes y fletes, material y suministro, entre los que citó combustibles, lubricantes, material de limpieza y de oficina, así como las transferencias corrientes para las instituciones públicas y privadas.
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