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La ONG critica que el Gobierno no haya adoptado ningún plan cuando hay 4.000 agresiones al año y el 60% de la población asocia inmigración y delincuencia
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Amnistía Internacional denunció este miércoles que el Gobierno español "no parece tener voluntad política para luchar de forma efectiva contra el racismo" porque "no sólo no ha adoptado un Plan seis años después del compromiso adquirido con la Declaración de la Conferencia de Durban (2001), sino que la puesta en práctica de las medidas a que obliga la normativa europea (...) ha estado muy lejos de ser efectiva".
Esta denuncia se produce en el Día Internacional contra el Racismo, jornada en la que la Unión Europea ha recibido una carta de la organización denunciando los problemas que como entidad supranacional, debe afrontar para frenar las prácticas discriminatorias.
En el caso español, Amnistía Internacional denuncia no sólo la "falta de voluntad política" sino también de la población, pues, según afirma la ONG recogiendo los datos del CIS, aunque la inmigración "es el tercer problema más importante de España, sólo un 0,7%" de los encuestados "percibe el racismo como un problema".
Asimismo, señalan que el Gobierno español "incumple las recomendaciones de la Comisión Europea contra el Racismo y la Xenofobia (ECRI)" al no tener datos oficiales sobre disrciminación, "lo que hace imposible conocer el alcance del racismo en el país". La misma Comisión, señaló en "su último informe" que "el 60% de la población española asocia la inmigración con la delincuencia".
"Sólo en lo que se refiere a agresiones protagonizadas por grupos racistas y dirigidas contra inmigrantes, personas sin hogar, homosexuales o prostitutas, según el informe RAXEN Especial 2006, la cifra supera las 4.000 agresiones anuales", afirma AI, que "ha documentado en los últimos años numerosos casos de malos tratos por parte de distintas fuerzas de seguridad con un componente racista".
También con motivo del día contra el racismo, el Movimiento contra la Intolerancia pide al Gobierno español, en un comunicado, el cierre de las páginas web racistas y la prohibición de conciertos y música xenófoba difundida por la red, al tiempo que urge a las Cortes Generales a la futura aprobación de la Ley contra el racismo, la intolerancia y la violencia en el deporte.
La organización alega que España continúa albergando prejuicios y conductas discriminatorias, siendo los inmigrantes junto a los gitanos los colectivos más vulnerables, junto con las personas sin hogar, los homosexuales, los musulmanes y los judíos.
En Europa
En una carta remitida a la Comisión Europea, al Consejo y al Parlamento de la UE, Amnistía Internacional insta a los mandatarios a "tomar medidas concretas para poner fin a la discriminación racial" porque "existe una gran diferencia entre las promesas de los gobiernos y la práctica real".
Un ejemplo sería el hecho de que "ni siquiera la mitad de los Estados de la UE han aplicado planes nacionales de acción contra el racismo ni han ratificado el protocolo 12 del Convenio Europeo de Derechos Humanos, lo que permitiría llevar ante los tribunales casos de discriminación", apunta la ONG.
Además, se han aprobado leyes en los países de la UE que, según Amnistía, "discriminan a los ciudadanos extranjeros y a las minorías étnicas en Europa", como la política antiterrorista británica "que fomenta en parte (...) el racismo creciente" o la negación de derechos sociales o culturales a los gitanos "en muchos Estados de Europa".
Por todo ello, la organización ha reclamado en su carta a la UE que "ejerza presión para aplicar las directivas para la igualdad racial y el empleo; mejore su legislación para garantizar la igualdad y la eficacia en la protección por todos los motivos y actos de discriminación; y que legisle para brindar protección efectiva contra la delincuencia y la apología del odio, a la vez que protege la libertad de expresión".
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