POR PEDRO CASTRO
La doméstica Elisa Deidania González, condenada a 30 años de prisión por el asesinato del empresario arenero José Castro el 26 de noviembre del 2003 en San Cristóbal, fue ubicada el pasado sábado en el barrio El Prado, en Azua, por el equipo de investigación del programa “El Informe, con Alicia Ortega”.
González fue sorprendida en un colmadón cuando departía con varias amigas y al percatarse de la presencia de la periodista Ortega se fue del lugar y entró a varias viviendas huyendo para evitar que la entrevistara, pero luego accedió.
Las imágenes de la entrevista serán difundidas esta noche en el programa El Informe, que produce la periodista Ortega, por el canal 7, de Antena Latina.
Con su rostro cubierto por una gafa que en ningún momento quiso quitarse, negó su identidad y dijo llamarse Yocasta Ramírez, aunque por los menos seis personas la identificaron como la mujer implicada en el crimen contra el empresario.
“Usted me está confundiendo. Yo no soy Deidania, no he cometido ningún crimen”, precisa la mujer ante la insistencia de la periodista que fue llevaba al lugar por dos personas que conocen a la doméstica.
“Yo no me llamó Deidania, mi nombre es Yocasta”, sostiene la señora con su rostro cubierto por la gafa a pesar de que la periodista le insistía en que se quitara los lentes.
“Es que no tengo por qué quitarme mis lentes, ¿porqué razón debo quitármelos”, respondió a la petición.
-- ¿Deidania, déjame verte, ¿para dónde tu vas?
-- Para mi casa.
-- Déjame ver tu cédula.
-- Mi cédula está donde vivo y mi hermano no está ahí.
Luego ofreció un número de cédula falso (4696842) y dijo que nació el 14 de octubre de 1979.
El detalle del ocultamiento de su rostro hizo recordar a quienes siguieron el caso, que incluso cuando las autoridades la sometieron a la Justicia en el 2003 tampoco dejaba que vieran su cara.
Cuando la periodista hizo referencia al crimen del empresario arenero ella le preguntó a qué crimen se refería, pretendiendo ignorarlo.
La mujer encontró refugio al asedio de la periodista en dos viviendas, y logró desaparecer por la puerta trasera de una de ellas en el barrio El Prado, de Azua.
La prófuga, identificada por lo menos por seis personas del lugar, irrumpió abruptamente en tres viviendas cuando se percató que era perseguida por las cámaras de El Informe. La semana pasada las autoridades informaron que desconocían su paradero y que creían que podía encontrarse fuera del país.
La esposa del arenero Castro, Miriam Brito, fue indultada por el Poder Ejecutivo mediante el decreto 705-07, el 23 de diciembre del año pasado.
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