El proceso de renegociación de los contratos entre la Corporación Dominicana de Empresas Eléctricas Estatales (CDEEE) y las generadoras podría sufrir un nuevo revés, debido a que al reclamo de pago de 90 millones de dólares hecho por éstas se le agregarían otros 110 millones de dólares que vencen el 25 de este mes.
Una fuente del más alto nivel del Consejo Nacional de la Empresa Privada (Conep) dió la información, al considerar que sería "improcedente" plantear renegociaciones de contratos cuando se mantiene una deuda corriente de 90 millones de dólares y está a punto de vencerse otro compromiso que involucra adicionalmente 110 millones de dólares en facturas a los generadores.
Opinó que para el Gobierno sería difícil saldar ese déficit, más aún cuando está emplazado por el Banco Mundial a cumplir otras exigencias que permitirían el desembolso de un préstamo sectorial.
Esas condiciones exigidas por el Banco Mundial son el pago de 45 millones de dólares a las empresas generadoras de electricidad pendientes de las facturas del 2005, conciliación de las deudas entre los agentes del sector eléctrico, constancia de las medidas fiscales adoptadas por el Gobierno para ubicar las fuentes de los subsidios al sector, y demostrar que existe un adecuado entorno macroeconómico.
La CDEEE aspira a una renegociación de los contratos con las empresas capitalizadas.
Esos contratos fueron ya revisados en una renegociación anterior conocida como Acuerdo de Madrid, y que según la fuente citada implicó reducciones de precios de hasta un 41 por ciento.
"En este proceso podemos afirmar que el mayor beneficiario de estos acuerdos fue el Estado dominicano, ya que se liberó de una significativa deuda con los generadores", dijo.
Opinó también que "si se logra establecer un plan que reduzca las pérdidas de las distribuidoras, la demanda podría ser abastecida en su totalidad con estándares de calidad y precio internacionales y el crecimiento natural del sector crearía espacios para el fortalecimiento financiero de la industria".
El tema del sector eléctrico se ha vuelto crucial para las autoridades, debido a que sus técnicos han planteado que sin la revisión de los contratos no se viabiliza una solución a la crisis estructural que lo afecta.
Pero además de ello, las presiones en esa dirección no sólo vienen del Banco Mundial sino que el Fondo Monetario Internacional las ha acogido y puesto en su lista de prioridades.
Así, se recuerda que el mes pasado, durante la reunión conjunta del FMI y el Banco Mundial en Singapur, el señor Agustín Carstens, subdirector del FMI, tras reunirse con las autoridades dominicanas presentes en el encuentro, conminó a las autoridades a persistir en la implementación de políticas sólidas encaminadas a consolidar las finanzas públicas y asegurar que los beneficios obtenidos hasta ahora con el programa de estabilidad económica se sostengan.
"Dichos logros necesitan ser apuntalados por la puesta en ejecución de las reformas institucionales y estructurales planteadas en el programa y por redoblados esfuerzos tendentes a resolver los problemas del sector eléctrico", dijo el alto funcionario del FMI.
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