Bachelet intentó calmar a la gente pero la tierra siguió temblando. |
Varias réplicas fuertes se han registrado en Chile luego del terremoto de 7,7 grados que sacudió la zona norte de ese país el pasado miércoles. Dos de ellas ocurrieron cuando la presidenta, Michelle Bachelet, visitaba la zona.
La mandataria prometió ayuda del gobierno a la población afectada e inspeccionó las operaciones de asistencia humanitaria.
El sismo de grado 7,7 en la escala de Richter costó la vida a dos mujeres, dejó centenares de heridos, unos 15.000 damnificados y unas 4.000 viviendas destruidas en la ciudad costera de Tocopilla y las localidades de María Elena y Quillagua, en la región de de Antofagasta, en el norte del país.
"Tranquilos, porque para eso estamos aquí", fueron las palabras con las que la mandataria intentó calmar a los habitantes durante su recorrido que coincidió con dos réplicas de 5,9 y 6,2 grados las cuales aumentaron el temor de la gente.
Las autoridades informaron que, como parte del operativo de ayuda, el Ejército instaló ya un hospital de campaña, mientras la Fuerza Aérea se encontraba en la tarea de hacer algo similar.
También llegaron unas 400 casas prefabricadas y nueve toneladas de medicinas, alimentos y frazadas a la región que fue declarada zona de catástrofe.
Organizarse
Bachelet también pidió a la población seguir las recomendaciones de quienes están a cargo de las tareas de reconstrucción y emergencia.
En tal sentido les hizo un llamado a organizarse, ya que -dijo- "hay instituciones muy activas, que tienen planes de emergencia y la gente debe comportarse de acuerdo a las instrucciones de estos organismos".
Mientras tanto, la Oficina Nacional de Emergencia (Onemi) informó haber recibido ofertas de ayuda de los países vecinos, entre ellos Argentina, Perú, Venezuela y Ecuador así como de Japón.
También hizo saber que el desastre natural no logró dejar aisladas a las poblaciones aunque sí se han registrado daños en algunos caminos.
Actividad económica
El puerto de Tocopilla, de unos 24.000 habitantes que viven principalmente de la pesca, está paralizado. La mayoría de la población de resiste aún a regresar a sus casas por temor a que sean derrumbadas por las réplicas.
Mientras tanto, las poderosas empresas encargadas de la importante actividad minera del norte de Chile, informaron haber reanudado su actividad, interrumpida por los cortes en el suministro eléctrico que produjo el terremoto.
Tal es el caso de la estatal Corporación del cobre (Codelco), principal productora mundial de metal que anunció este jueves que las operaciones son normales en sus yacimientos de Chuquicamata y Radomiro Tomic, al igual que su división El Salvador, en la región de Atacama y el puerto de Mejillones.
Un mensaje similar provino del grupo australiano BHP Billiton en cuanto a sus minas de Spence, Cerro Colorado y Escondida, esta última considerada el mayor yacimiento cuprífero del mundo.
En Perú también
El epicentro del terremoto en Chile se registró a 170 kilómetros al nor-noroeste de la ciudad de Antofagasta, cerca del pueblo de Quillagua.
La región forma parte de lo que los geólogos denominan "Cinturón de fuego del Pacífico", un área en el océano Pacífico que registra choques de las placas tectónicas.
Debido a esto y a su intensidad el sismo del miércoles así como sus réplicas se hicieron sentir en zonas aledañas.
Precisamente este viernes, el Servicio Geológico de EE.UU. reportó un sismo de 4,2 grados en la escala Richter en el departamento peruano de Ica.
Si bien no se registraron víctimas ni daños, la región donde se hizo sentir este temblor es una de las más devastadas por el terremoto que en agosto pasado dejó en la costa central peruana, casi 600 muertos, más de 300 desaparecidos y unas 75.000 viviendas destruidas.
No hay comentarios.:
Publicar un comentario